Para leer en la mesa de Shabat: Seis panes

Una vez, un iehudí entró a una panadería y compró seis panes. Al otro día volvió y compró la misma cantidad. Así fue haciendo durante varios días.
Muy intrigado por esta conducata, el panaderodecidióque le preguntaría la próxima vez que volviera. Así fue que al retornar su cliente, le preguntó:
- ¿Por qué compras siempre seis panes?
El comprador contestó: - Dos, son para mí y mi esposa. Otros dos, son para pagar una deuda. Los últimos dos, son en condición de préstamo.
El dueño estaba más intrigado que antes. ¿Pagar deudas y ofrecer préstamos con panes? ¿Todos los días?
Más tarde, entró al comercio el rabino del lugar. El panaderoaprovechó la ocasión para pregutarle si sabía que significaba aquella enigmática respuesta. Este sonrió y le dijo:
-¿No entiendes? Dos panes, para él y su esposa. Otros dos para sus padres, a quienes tanto les debe. Los últimos dos, para sus hijos, quienes estarán, a su vez, en deuda con ellos...
Fuente: Or Dameseh. Año 14 Nº 24 Año 5780 Rosh Hashaná.


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